Cuando el mundo se detuvo en 2020, una enorme ola de adopción digital permitió a las empresas del sector de bienes de consumo (CG) comercializar y vender productos directamente a los consumidores a medida que se agolpaban online para comprar los bienes esenciales que necesitaban. Sin embargo, la adopción digital en el sector de bienes de consumo no solo afectó al espacio de empresa a consumidor (B2C). También afectó al vasto ecosistema de empresa a empresa (B2B) de fabricantes, distribuidores y mayoristas que trabajan juntos para llevar los productos esenciales a las tiendas locales.

Las organizaciones de actuaron rápidamente para adaptarse a estas nuevas condiciones del mercado. En nuestra encuesta del sector, casi todas las empresas de CG (99 %) aceleraron la transformación digital en su ruta de comercialización de B2B. Y esa aceleración sentó las bases para que las marcas superaran el desafío actual de una economía incierta al tiempo que impulsaron un crecimiento rentable.