¿Cómo funcionan los agentes inteligentes?
Piense en los agentes inteligentes como los mejores solucionadores de problemas. Analizan la información, toman decisiones y adaptan su enfoque a lo largo del tiempo. Pero, ¿cómo funcionan realmente?
Hay tres etapas principales en las que operan los agentes inteligentes:
- Percepción de su entorno: los agentes inteligentes recopilan datos de sensores, API y otras fuentes. Por ejemplo, un chatbot recopila las consultas de los clientes, mientras que un sistema de detección de fraudes se centra en los patrones de transacción.
- Tramitación y toma de decisiones: a continuación, los agentes analizan los datos y aplican la lógica para determinar la mejor forma de proceder. Algunos siguen reglas predefinidas, mientras que otros utilizan el aprendizaje automático para refinar sus respuestas.
- Actuación: una vez que un agente inteligente decide cuál es el mejor enfoque, ejecuta la tarea, lo que podría significar responder a un cliente o marcar una actividad sospechosa de la cuenta.
La realmente mágico ocurre cuando estos agentes aprenden y se adaptan. En lugar de seguir instrucciones estáticas, continúan ajustando sus estrategias en función de las interacciones pasadas. Con esta capacidad de evolución se convierten en una herramienta de valor incalculable para mejorar los flujos de trabajo rutinarios dentro de su empresa.