2. Establezca sus objetivos de CRM
Una vez que haya elegido el software de CRM adecuado para su empresa, es hora de asegurarse de que los objetivos de CRM estén en consonancia con sus metas comerciales generales. Defina objetivos medibles y realistas sobre cómo quiere que el CRM ayude a sus equipos a prosperar. Con el tiempo, puede realizar un seguimiento de esos objetivos y ajustarlos si es necesario.
Hay muchas cosas que su CRM puede ayudarle a hacer, especialmente si opta por un sistema basado en Artificial Intelligence (IA).
Por ejemplo, su CRM puede ayudarle a mejorar el recorrido del comprador, desde la etapa de prospección hasta la captación de clientes, pasando por la gestión de la atención al cliente. Una vez que haya trazado ese recorrido en su CRM, podrá saber en qué áreas está alcanzando sus objetivos y en cuáles no.
Un CRM también puede ayudarle a alcanzar objetivos de eficiencia, gracias a su capacidad para ahorrar tiempo con la automatización de tareas como la captación de clientes, el seguimiento posterior a la compra, la facturación, etc. Con la configuración adecuada, su CRM puede mejorar sus costes de adquisición y retención de clientes. Incluso puede hacer que su CRM extraiga y envíe informes automáticamente de forma periódica, ofreciéndole actualizaciones automáticas sobre las métricas más importantes.
Al fijar objetivos de CRM, podrá ver cómo la segmentación y la personalización aumentan la respuesta a las campañas de marketing, la cantidad de acuerdos adicionales que cierra su equipo de ventas y todo el tiempo que se ahorra. Su departamento de atención al cliente puede centrarse en los casos de alta prioridad, ya que los CRM basados en IA como Salesforce utilizan agentes de IA, artículos de la base de conocimientos generados mediante IA y chatbots para gestionar tareas pequeñas y revisar rápidamente historiales de casos para agilizar las interacciones de servicio.